París, Francia, 20 de diciembre del 2019.- Los ferroviarios de la Confederación Francesa Democrática del Trabajo (CFDT), uno de los sindicatos más poderosos del país, descartaron hoy una tregua en el paro contra la reforma de la jubilación, desafiando a su secretario general, Laurent Berger.
En un comunicado, advirtieron que el gobierno sigue sin propuestas que satisfagan las demandas del gremio, uno de los más activos en la huelga decretada a partir del 5 de diciembre, con un severo impacto en el transporte público, en particular los trenes.
La víspera, tras la segunda jornada de diálogo de los actores sociales con el primer ministro, Edouard Philippe, Berger había expresado que los encuentros no dejaron avances, pero se mostró favorable a detener las protestas hasta enero, ante la llegada de las fiestas navideñas y de fin de año.
De corte reformista y cercana al oficialismo, la CFDT se opone fundamentalmente a la edad de equilibrio de 64 años propuesta por el gobierno, pero es de las poquísimas que respalda el sistema universal por puntos, que liquidaría los 42 regímenes de pensiones actuales, la piedra angular del plan del ejecutivo.
La también influyente Confederación General del Trabajo (CGT) sí rechaza la iniciativa gubernamental en su totalidad y exige su anulación, con los ferroviarios entre las puntas de lanza de la batalla, la cual llevó a las calles de Francia a cientos de miles de personas, el 5, el 10 y el 17 de diciembre.
Con la determinación de los ferroviarios de la CFDT y la CGT, dos colosos sindicales con posturas alejadas, solo los de la UNSA (Unión Nacional de Sindicatos Autónomos) se acogerían a la tregua, contra la voluntad de no pocos de sus miembros.
Por decimosexta jornada consecutiva, esta capital y otras ciudades importantes amanecieron hoy con una circulación bien reducida de trenes internacionales, regionales y entre urbes, cuando los franceses comienzan a viajar para las celebraciones navideñas.
El ejecutivo busca alternativas para aliviar la crisis del transporte, que parece seguirá al menos hasta enero, después de los escasos progresos en las pláticas de los últimos días entre Philippe y los actores sociales, aunque el primer ministro estimó que sí hay avances.
La Intersindical, grupo que reúne a las organizaciones radicales en su rechazo a la reforma de la jubilación, con la CGT a la cabeza, ya anunció para el 9 de enero la cuarta jornada de movilizaciones nacionales tras el inicio de la huelga.
Asimismo, repudió las acusaciones del gobierno de que afecta con su postura a las personas, al impedirles viajar en los días festivos, recordando a Philippe que fue él quien decidió presentar un proyecto impopular el 11 de diciembre, consciente del malestar que desataría.
Fuente: Prensa Latina