Asunción, Paraguay, 8 de abril del 2020.- La bajada lenta pero constante del nivel del río Paraguay se suma hoy a las dificultades de las empresas importadoras locales afectadas por la cuarentena para evitar la expansión de la COVID-19.
Desde hace dos meses, el cauce de ese río mantiene una bajada constante lo que complica el tráfico de buques y barcazas que transportan importantes cargamentos, señalaron fuente del Centro de Importadores, un gremio duramente golpeado por la pandemia.
Importadores y exportadores se encuentran sumamente preocupados, no solo por la situación creada por la enfermedad que produce el SARS-CoV-2, la falta de previsión y las dificultades para adquirir o enviar cargamentos, sino también por el decrecimiento de la privacidad vía fluvial del país, señalaron desde ese gremio.
El Fuerte Olimpo, un distrito capital del departamento de Alto Paraguay, donde la altura considerada normal para esta época del año es de seis metros, actualmente está en solo 3.30 metros, muy por debajo del nivel habitual, aseguraron.
Según la Prefectura Naval, existen puntos muy difíciles donde las grandes embarcaciones, que transportan generalmente hierro o bobinas, fraccionan sus cargas para poder pasar.
El Centro de Importadores informó que se unió con otros gremios para plantear un proyecto al Equipo Económico Nacional, que según su vocero Nery Giménez, les urge contar con una estrategia.
La dificultad más grande para los importadores radica en la imposibilidad de realizar la planificación propia del sector, puesto que se desconoce la proyección del consumo por la situación creada por la pandemia de COVID-19.
Fuente: Prensa Latina
