Arica, Chile, 2 de octubre del 2019.- Las operaciones de despacho de carga de importación boliviana desde el puerto de Arica se reactivaron ayer, luego de la reunión entre la Administradora de Servicios Portuarios-Bolivia (ASP-B) y la Empresa Portuaria Arica (EPA), que todavía negocian las tarifas que se aplicarán en el puerto.
“Se llegó a un acuerdo para que la carga boliviana pueda ser programada y despachada”, indicó al respecto el gerente ejecutivo de la administradora portuaria boliviana, David Sánchez.
No obstante, aclaró que el descongestionamiento de la mercadería se llevará a cabo de acuerdo con el trabajo operativo de la Terminal Puerto Arica (TPA).
Sánchez acotó que las negociaciones entre las partes en conflicto continuarán, con el objetivo de llegar a un trato que beneficie a la parte chilena y boliviana.
“Tenemos hacia adelante el desafío de seguir trabajando ambas entidades, sobre todo en el despacho de la carga, siempre velando por los intereses del comercio exterior boliviano en cuanto a lo que significa mejores condiciones, tanto económicas como operativas”, afirmó el ejecutivo nacional, pasado el mediodía de ayer, luego de sostener una segunda reunión con los operadores del puerto chileno.
Sánchez apuntó que para que para llegar a un acuerdo se tuvo que hacer un análisis sobre cuán importante es en términos económicos el movimiento de la carga boliviana para Chile, mientras que para Bolivia es clave el uso del puerto ubicado en el extremo norte del territorio vecino.
“Hay una coordinación con los funcionarios del puerto y para eso nos organizaremos, para que se haga un despacho inmediato”, dijo el representante nacional.
Aunque agregó que el proceso de despacho de la mercadería no será inmediato, por lo que ciertas cargas tendrán que seguir a la espera. “Planteamos un nuevo inicio, de una nueva relación, cada uno haremos el esfuerzo, esperamos mensajes mucho más conciliadores”, indicó Sánchez.
Del lado chileno, ni la EPA ni el concesionario privado TPA se refirieron a un posible acuerdo alcanzado con la institución boliviana. Una fuente del sector comentó que las negociaciones continuarán para lograr un consenso sobre las nuevas tarifas.
En julio pasado, la TPA aplicó su Manual de Servicios a los clientes bolivianos, medida por la cual se incrementa las tarifas de las cargas de importación.
Por ejemplo, en el caso de los contenedores de 21 y 49 pies, por los que se pagaba unos 30 dólares, ahora se deberá cancelar 63 dólares, un monto que no se sabe si la ASP-B transferirá a los importadores o se hará cargo.
Desde el 17 de septiembre, TPA dispuso el cobro anticipado a la administradora boliviana, de modo que los despachos se suspendieron, lo que ocasionó que al menos 1.000 camiones estén parados en el puerto, sin recoger carga para retornar a Bolivia. Se prevé que las negociaciones continúen durante esta jornada.