Toulouse, Francia, 16 oct (Prensa Latina) El presidente francés, Emmanuel Macron, y la canciller federal alemana, Angela Merkel, visitaron hoy aquí la planta de ensamblaje del avión A-350, en medio de tensiones comerciales con Estados Unidos por el diferendo Boeing-Airbus.
La estancia de los mandatarios en la instalación se enmarcó en el Consejo de Ministros bilateral que encabezaron en esta sureña ciudad y constituyó una señal de su voluntad de hacer frente a Washington, que parece dispuesto a imponer sanciones por siete mil 500 millones de dólares anuales a la Unión Europea (UE), amparado por la Organización Mundial del Comercio (OMC).
‘Quería que nos volviéramos a encontrar en Toulouse, con Angela Merkel, para defender un buque insignia industrial, en un momento de tensiones comerciales’, publicó Macron en Twitter a propósito de la visita.
El jefe de Estado colocó en la red social una foto junto a la canciller federal alemana y trabajadores de la planta de ensamblaje del A-350, considerada la aeronave más moderna y ecológica, que en su nueva versión sería la respuesta europea al Boeing-777X.
‘Junto con los hombres y mujeres de Airbus, hemos demostrado nuestra capacidad de tener éxito juntos’, precisó.
Más temprano, el ministro francés de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire, calificó de error político y económico las sanciones anunciadas por Estados Unidos.
Mañana tendré un encuentro en Washington con el negociador norteamericano, Robert Lighthizer, el tercero o el cuarto de este año, y le reiteraré que es un error político y económico, y que si insisten, habrá una respuesta europea, señaló en declaraciones a la emisora Europe 1.
De acuerdo con el funcionario, la UE aplicaría en el marco de la OMC medidas similares o incluso más fuertes a Estados Unidos, que hasta el momento no ha aceptado negociar.
La organización autorizó a principios de este mes las sanciones a la UE por sus subsidios ilegales a Airbus, convertido en el principal fabricante del mundo de aeronaves comerciales.
El bloque comunitario prevé responder al amparo de la propia OMC, la cual permitiría una acción similar a Bruselas, que acusó a Boeing de beneficiarse con más de 19 mil millones de dólares de subvenciones entre 1989 y 2006.
Durante 15 años el conflicto ha estado en el escenario de la organización, donde la UE atribuye a Estados Unidos la falta de voluntad para trabajar en una salida acordada del diferendo comercial.
