Ciudad de México, a 27 de noviembre de 2019.- La resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), de desechar los cuatro recursos interpuestos por el PAN en contra de la elección de Rosario Piedra Ibarra como titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), confirma que este proceso se realizó en estricto apego a la legalidad, transparencia y que se cumplió con los procedimientos de la Cámara de Senadores.
Así lo manifestó el senador Ovidio Peralta Suárez, vocero del Grupo Parlamentario de Morena, quien explicó que el TEPJF tomó esta decisión debido a que dicha elección se trató de un tema de derecho parlamentario y se realizó de acuerdo con el reglamento del Senado.
Recordó que la designación de Piedra Ibarra fue un acto soberano de la Cámara de Senadores, y de acuerdo con la Ley de Amparo y la Constitución, son improcedentes las acciones o controversias de inconstitucionalidad.
Dijo que el Grupo Parlamentario del PAN miente sobre el proceso de elección de la nueva titular de la CNDH, pues la propia presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, Kenia López Rabadán, aseguró ante el Pleno que se trató de un proceso equitativo, en Parlamento Abierto, transparente, democrático, participativo y de máxima publicidad.
Además, el legislador de Morena refirió que López Rabadán fue quien elaboró el dictamen donde se propuso la terna. Ella dijo que los tres aspirantes contaban con probidad, interlocución con la sociedad y con los poderes públicos, así como cercanía con las víctimas y una perspectiva adecuada sobre los trabajos de la CNDH, agregó Peralta Suárez.
No sólo eso, detalló, también aseguró que los perfiles que integraron la terna satisfacían a plenitud los requisitos legales para encabezar la Comisión Nacional.
El senador Peralta Suárez aseveró que con la decisión del tribunal se garantiza la legitimidad del proceso de elección y se fortalecen la soberanía de las decisiones del Senado de la República.
Finalmente, hizo un llamado a dejar a un lado los intereses mezquinos y sumar voluntades para resolver conjuntamente la grave crisis de derechos humanos que el gobierno actual heredó.
