Ginebra, Suiza, a 4 de noviembre del 2021.- La adhesión de China a la Organización Mundial del Comercio (OMC) en 2001 es un paso importante para su desarrollo económico y un hito en la globalización, dijo el presidente del Foro Económico Mundial (FEM), Borge Brende.
“Históricamente, ningún país ha crecido tan rápido como lo ha hecho China desde 1979… alrededor de 800 millones de personas han salido de la pobreza extrema en unas pocas décadas… después de que se unió a la OMC en 2001, China está muy integrada en el economía global”, aseguró Brende en una reciente entrevista con Xinhua.
La duplicación del PIB mundial durante las últimas décadas se basa en la globalización, recordó Brende, y agregó que China ha pasado de ser una economía en desarrollo a “uno de los países más industrializados del mundo”.
“No hay duda de que cuando China se unió a la OMC en 2001, era una economía diferente. Hoy es una economía próspera mucho más grande, también una economía que invirtió mucho más en el exterior y una economía que depende más del comercio”, continuó.
China se ha convertido en uno de los mayores inversores extranjeros directos, lo que significa que ha madurado como una economía globalizada, reconoció.
Brende también elogió los logros de China en áreas de nuevas tecnologías.
China, señaló, es un líder mundial en trenes de alta velocidad y tecnología financiera, con un papel importante en la reducción de los costos de la energía solar y eólica.
Según Brende, la adhesión de China a la OMC también ha demostrado que China cree firmemente en un sistema multilateral.
China está comprometida a eliminar las barreras y obstáculos comerciales y trabaja para construir un régimen comercial multilateral fuerte, expresó.
La economía global enfrenta grandes desafíos, como equilibrar la presión inflacionaria y el crecimiento económico, abordar la escasez de energía, reducir las emisiones de CO2, reforzar las cadenas de valor globales, mejorar las inversiones en infraestructura, declaró Brende, al tiempo que instó a los líderes mundiales a trabajar juntos para crear soluciones comunes.
Brende cree que la globalización se trata de aumentar la productividad en el mundo y que los países pueden usar sus ventajas comparativas con un pensamiento de ganar-ganar para traer prosperidad.
“También necesitamos que el comercio (global) continúe porque no hay una recuperación real sin la recuperación comercial”, abundó.
Fuente: Xinhua
