6 de mayo de 2021.- El hundimiento del Titanic, la explosión y el derrame de petróleo de Deepwater Horizon , la pérdida de El Faro en el huracán Joaquín y el trágico incendio a bordo de The Conception frente a la costa de Santa Bárbara: ¿qué tienen estos infames desastres marítimos? ¿en común? Todos causaron pérdidas sin precedentes. Todo podría haberse evitado.
Todos involucraron la invocación de una ley marítima conocida como Ley de Limitación de Responsabilidad.
El Congreso aprobó la Ley de Limitación de Responsabilidad (Código 46 de los Estados Unidos, Capítulo 305) en 1851 para promover y proteger la industria del transporte marítimo. En ese momento, los barcos y las mercancías o pasajeros que transportaban desaparecieron en las tormentas, fueron invadidos por piratas y se perdieron en otros eventos sobre los que los armadores no tenían control. La Ley de limitación de responsabilidad ofrecía a los propietarios de embarcaciones la protección que tanto necesitaban contra la responsabilidad por pérdidas de barcos y carga, así como lesiones o muertes en el mar, al limitar las recuperaciones al valor de la embarcación. Con esta ley, los propietarios de embarcaciones no podían ser demandados por más de lo que valía la embarcación.
Hace mucho tiempo, la Ley de Limitación de Responsabilidad cumplió su propósito, especialmente cuando los propietarios de embarcaciones no tenían el beneficio de los pronósticos meteorológicos y la piratería era desenfrenada. Hoy en día, se ha convertido en un medio para que los propietarios de buques negligentes eludan su responsabilidad de arreglar las cosas después de las tragedias marítimas. Los equipos y la tecnología modernos han mitigado significativamente los riesgos que alguna vez enfrentaron las empresas marítimas.
Las tragedias de hoy en el mar no son causadas por eventos fuera del control del propietario de un barco.
Las tormentas son más predecibles.
Las herramientas y el equipo están hechos para durar.
Los armadores tienen la obligación de mantener sus embarcaciones y tomar las precauciones necesarias en función de las predicciones meteorológicas. Si no lo hacen, deberían ser considerados responsables. No se les debería permitir esconderse detrás de una ley anticuada diseñada para proteger a los propietarios de embarcaciones (y la economía) hace 170 años.
Usar una ley de 170 años para evitar la rendición de cuentas
El propietario de cada buque mencionado al principio de este artículo invocó la Ley de Limitación de Responsabilidad para defender sus intereses. Incluso los propietarios del Titanic , que nunca llegó a las costas de Estados Unidos, presentaron una Petición de limitación de responsabilidad en Nueva York. En lugar de tener tiempo para sanar, los sobrevivientes de estos incidentes y las familias que perdieron a sus seres queridos se enfrentaron a una opción: emprender acciones legales ahora o renunciar para siempre a su derecho a hacerlo.
Cuando el propietario de una embarcación busca protección bajo la Ley de Limitación de Responsabilidad, presenta una demanda civil en el Tribunal de Distrito Federal. Se notifica a todos los posibles reclamantes (incluidos los heridos y los familiares supervivientes). Cada uno de ellos recibe cartas certificadas informándoles que el propietario del barco los está demandando.
Como parte de una Petición de limitación de responsabilidad, el propietario de la embarcación también afirma que la embarcación valía una cierta cantidad de dinero. Si el barco se hundía, el valor podría ser cero. Para el Titanic , el valor se estimó en menos de $ 100,000: $ 300 por los 14 botes salvavidas restantes y $ 92,000 por las ganancias del barco. En virtud de la Ley de limitación de responsabilidad, los propietarios del barco “insumergible” buscaron limitar las reclamaciones por daños a este valor. Para las familias de las 1,517 personas que murieron y los 711 sobrevivientes, esto habría equivalido a aproximadamente $ 41 cada uno.
Para las viudas de los tripulantes de El Faro, para las familias de las personas que murieron en el incendio de The Conception , para cada persona que resultó herida o muerta en la explosión de Deepwater Horizon , la defensa de Limitación de Responsabilidad fue como una bofetada. Estas personas ya estaban lidiando con el trauma de ser heridos o perder a un ser querido. Ya estaban lidiando con preguntas sobre cómo llegar a fin de mes sin el salario de un miembro de la familia. Ahora tenían que pensar en emprender acciones legales o, esencialmente, renunciar a su derecho a recuperar una compensación justa por lo que soportaron.
¿Cómo tiene sentido que el propietario de una embarcación demande a alguien que ha resultado herido o ha perdido a un ser querido? Esto es lo que sucede cuando el propietario de una embarcación presenta una Petición de limitación de responsabilidad. Requiere que los demandantes potenciales se presenten dentro de un período establecido, o perderán el derecho a hacerlo. También requiere la consolidación de reclamos en un tribunal federal. Esto pone al propietario de la embarcación en una ventaja.
Desafiando la defensa por limitación de responsabilidad
Los trabajadores en alta mar, los miembros de la tripulación de los buques pesqueros comerciales, los pasajeros de cruceros y todas las personas que ponen un pie en los buques en aguas de los EE. UU. Están protegidos por leyes marítimas que brindan rutas de recuperación en caso de una lesión o pérdida de la vida. La Ley de limitación de responsabilidad es una forma en que los propietarios de embarcaciones intentarán defenderse, pero usted también tiene derechos.
Tiene un tiempo muy limitado para presentar una respuesta a una Petición de limitación de responsabilidad. Si resultó herido o perdió a alguien en el mar y recibió una carta certificada que dice que el propietario del barco lo está demandando, hable con un abogado. Encuentre un profesional legal que pueda proteger sus intereses y presentar una respuesta de manera rápida y efectiva.
La Ley de limitación de responsabilidad solo se aplica a los accidentes y lesiones en el mar que ocurren sin culpa del propietario del barco. Debido a la tecnología y los equipos con los que trabajan los propietarios de embarcaciones y las empresas marítimas en la actualidad, el margen de falla es bastante amplio. También hay más pruebas e información para respaldar las reclamaciones de negligencia del propietario del buque. No hay excusas para los desastres marítimos.
Historia de éxito en la representación de trabajadores marítimos lesionados
Arnold & Itkin ha luchado por los trabajadores marítimos lesionados y sus familias en los EE. UU. Cuyo futuro ha sido amenazado, después de haber experimentado lo impensable. Sus abogados marítimos representaron a varias de las viudas de la tripulación de El Faro y un tercio de la tripulación de Deepwater Horizon asegurando recuperaciones sin precedentes que les dieron a estas víctimas una oportunidad real de reconstruir sus vidas. Además, la firma encontró las respuestas que buscaban los sobrevivientes y las familias, y la sensación de cierre que necesitaban al ver que se hiciera justicia.
Arnold & Itkin ha asegurado más de $ 10 mil millones para los heridos y agraviados. Cuando los abogados fundadores Kurt Arnold y Jason Itkin ven que las grandes corporaciones intentan esconderse detrás de leyes arcaicas e irrelevantes, no tienen miedo de ir a la batalla para arreglar las cosas. No importa qué. Obtenga más información sobre sus derechos y opciones durante una consulta gratuita con uno de los abogados marítimos de la firma hoy.
Fuente: gCaptain
