Washington, Estados Unidos, a 30 de octubre del 2019.- La Reserva Federal estadounidense (Fed) cerrará hoy su séptima reunión sobre política monetaria de 2019 cuando opiniones de expertos apuntan a una disminución de sus tasas de interés.
También, más allá de su independencia en la toma de decisiones, el Banco Central enfrenta las presiones y los llamados del presidente norteamericano, Donald Trump, para dar ese paso con el fin de favorecer el desarrollo de la economía.
El mandatario republicano, quien ha llegado a decir que esta entidad no sabe lo que hace y a calificar de tontos a sus directivos, demanda descender las tasas a cero por ciento o menos.
Al final de la cita de dos días de duración, la Fed emitirá este miércoles un comunicado acerca de los mencionados parámetros, y su titular, Jerome Powell, ofrecerá una rueda de prensa para explicar las determinaciones correspondientes.
Las probabilidades de una recesión de la economía de Estados Unidos aumentaron notablemente en los meses recientes, según las actas de la sexta reunión de dicho tipo de la entidad banacaria, dadas a conocer el pasado 9 de octubre. Aquel encuentro se celebró el 17 y el 18 de septiembre último, y al cierre la Fed bajó las tasas de interés, un cuarto de punto, a un rango de 1,75 a dos por ciento.
Tal decisión, que siguió a otra similar tomada en la cita precedente de finales de julio, dejó insatisfecho a Trump.
En un comunicado tras el evento de septiembre, la Fed precisó que ese paso, con siete votos a favor y tres en contra, respondió a los riesgos en el mundo y a la debilidad de la inversión y las exportaciones.
‘Recortamos las tasas a la luz de las implicaciones de los desarrollos globales para el panorama económico, así como las inexistentes presiones inflacionarias’, apuntó.
Asimismo, se refirió a incertidumbres sobre las perspectivas, y se comprometió a actuar según corresponda con el fin de mantener la expansión.
De acuerdo con los documentos publicados el 9 de octubre, la debilidad en la inversión empresarial y las manufacturas en 2019 han sido consideradas como indicadores de la posibilidad de una desaceleración más sustancial en el crecimiento económico estadounidense que la prevista.
La economía norteamericana creció a un ritmo anual de dos por ciento en el segundo trimestre de 2019, confirmó el Departamento de Comercio el pasado 26 de septiembre.
Idéntico al divulgado en agosto e inferior una décima al hecho público en julio, ese guarismo correspondió a la última lectura de las tres habituales que se realizan por cada etapa sobre el comportamiento del Producto Interno Bruto en el país.
Ese parámetro tuvo un avance de 3,1 por ciento de enero a marzo del presente año, recordó la fuente.
Reportes periodísticos reiteraron que dicho desempeño de abril a junio apunta a la ralentización económica de Estados Unidos, más allá de los constantes elogios que hace Trump sobre los supuestos logros de este sector.
Fuente: Prensa Latina